Page 135 - Brindando sobre los escombros - La dirigencia judía y los atentados: entre la denuncia y el encubrimiento - Edición del autor, (c) 2012 - 2024 Horacio Lutzky
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de Guido Di Tella, el 4 de enero de 2002 publicó un aviso fúnebre en La
Nación. Murió tranquilamente en Buenos Aires en diciembre de 2007.
Los iraníes desconfiaban de Croacia, cuyos nacionales en Bosnia
habían estado en guerra con la mayoría musulmana desde marzo
de 1993, entonces buscaban garantías de que las armas llegarían a
los combatientes musulmanes. En septiembre de 1993, el embajador
norteamericano en Croacia, Peter Galbraith, sostuvo reservadas
conversaciones con el ministro de Relaciones Exteriores croata y el
primer ministro bosnio, en un intento de detener el enfrentamiento
musulmán-croata. Dos meses después, el ministro de Relaciones
Exteriores croata comenzaba un contacto oficial con una visita a Sarajevo,
Bosnia. En marzo de 1994, diplomáticos norteamericanos concluyeron
negociaciones para formar una federación de bosnios musulmanes y
croatas que parara la guerra, unificara las fuerzas antiserbias y asegurara
la reapertura del contrabando de armas a través de Croacia. Un mes más
tarde, el 27 de abril de 1994, los Estados Unidos indicaron al gobierno
de Croacia que no pondrían objeciones si, a través de dicho país, eran
entregadas armas suministradas por Irán a los musulmanes bosnios.
Esa política fue conocida como «no instrucciones», que en ausencia de
«no» significa «sí». Simultáneamente, el mismo día se trasladó a Buenos
Aires en visita oficial el ministro croata de Relaciones Exteriores, Mate
Granic, quien permaneció en la capital argentina los días 27 y 28 de abril
de 1994. El alto funcionario, a la vez vicepresidente del gobierno, fue
recibido por el presidente Menem, el ministro de Defensa, Oscar Camillón,
y el canciller Guido Di Tella. El amparo norteamericano al operativo vía
Argentina es inocultable. El 28 de abril llegó a Zagreb el enviado del
[61]
Camarasa, ref. anterior). La denuncia impidió el nombramiento pero no alteró la
continuación de su permanencia en la Argentina.
[61] El 27 de abril de 1994 oficiales croatas visitaron al embajador Peter Galbraith para
conocer cómo respondería la administración Clinton a la reapertura de la vía iraní de
armas. Galbraith, que siempre instó a armar a los musulmanes bosnios, pidió urgentes
instrucciones al secretario de Estado, Strobe Talbott, y al consejero de Seguridad
Nacional, Anthony Lake, quienes le respondieron que la posición oficial era que «no
hay instrucciones», es decir que no habría objeciones de los Estados Unidos. Como el
investigador de los Países Bajos, Cees Wiebes, documentó en su libro Intelligence and
Brindando sobre los escombros • 131 • 3. Y en eso llegó Menem