Page 129 - Brindando sobre los escombros - La dirigencia judía y los atentados: entre la denuncia y el encubrimiento - Edición del autor, (c) 2012 - 2024 Horacio Lutzky
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Según el libro Operación Israel del periodista Hernán Dobry, Israel

        vendió a la Argentina, durante la dictadura, insumos de guerra

        por valores superiores a los setecientos millones de dólares, que

        equivalían en diciembre de 2010 a más de 1500 millones de dólares,

        realizándose algunas de esas operaciones con gran sigilo, en particular
        en las postrimerías de la Guerra de Malvinas, cuando se le cerraban

        a la Argentina todas las demás fuentes de provisión.  En su muy
                                                                              [54]
        documentada investigación, Dobry ilustra con detalle las relaciones
        entre los militares argentinos y la empresa Isrex Argentina, principal

        intermediadora en las enormes compras de armas. Los ingenieros Israel

        Lotersztain y Jaime Weinstein se destacaban entre los vendedores.

        Dobry finaliza diciendo que ése fue el único período en que Israel se

        convirtió en un proveedor importante de las fuerzas armadas, «lugar que
        nunca más pudo volver a ocupar por más que lo intentó en reiteradas

        oportunidades». No obstante, durante los años del contrabando de

        armas menemista a los Balcanes y hasta bien avanzado 1993, los martes
        y jueves a las dos de la madrugada llegaban a Ezeiza discretos envíos

        desde Israel que eran rápidamente trasladados a una larga hilera de

        camiones. Y de allí salían con escolta de las fuerzas de seguridad. No

        puede consignarse su contenido, si bien puede presumírselo. Hubo al

        menos una decena de contenedores —declaradamente de equipos de
        riego y anexos— de los cuales se preocupó por sacarlos rápidamente de la

        Aduana el embajador de Israel Yitzhak Avirán el 19 de julio de 1994, al día

        siguiente del atentado a la AMIA. Para ello aguardó en el automóvil a que
        el representante de Isrex Argentina hiciera las discretas gestiones que un

        rato después liberaron la carga.

          Numerosos agentes estatales argentinos, retirados o en actividad,

        tomaron parte en algún tramo de los negocios de armas con croatas

        y musulmanes bosnios. Y dichos negocios multinacionales fueron
        protegidos por integrantes de fuerzas de seguridad, algunas de las cuales,










           [54]  Hernán Dobry, Operación Israel. El rearme argentino durante la dictadura (1976-1983),
             Buenos Aires, Lumiere, marzo de 2011.



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