Page 74 - Brindando sobre los escombros - La dirigencia judía y los atentados: entre la denuncia y el encubrimiento - Edición del autor, (c) 2012 - 2024 Horacio Lutzky
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fuente de financiamiento para la Contra. En estos operativos intervino el
magnate y traficante saudí Adnan Khashoggi, quien cobró comisiones
[39]
millonarias por hacer de intermediario, a su vez, entre traficantes de
armas israelíes e Irán. Khashoggi era socio de nuestro conocido Al Kassar
y fue fundador de la minera Barrick Gold. Su cofundador y director
ejecutivo, Peter Munk, se reunió en Buenos Aires con la presidenta
argentina Cristina Kirchner el 15 de abril de 2010 —y semanas después
en Canadá— para intentar acelerar las cuestionadas obras en San Juan
para la mina de oro Pascua-Lama, el mayor emprendimiento minero de
América latina. [40]
El affaire Irán-Contras fue apenas un episodio más en la conexión
de Israel con la República Islámica. Esta relación continuó por varios
años, inmutable a las revelaciones periodísticas y a los escándalos en
Washington.
El primer ministro Yitzhak Shamir explicó crudamente los contactos
de Israel con Irán, en febrero de 1987, en visita a los Estados Unidos,
cinco años antes del atentado a la embajada de Israel en la Argentina,
adjudicado a Irán. Sostuvo que Israel estaba profundamente interesada
en una alianza estratégica con el país islámico, a pesar de su distancia
con el régimen imperante. Dio, entonces, tres razones básicas:
• Israel busca sostener sus tradicionales contactos con los militares
iraníes.
[39] Adnan Khashoggi reconoció en una entrevista en la cadena ABC de TV, el 11 de
diciembre de 1986, que aportó un millón de dólares para financiar el primer envío
de armas en el trato Irán-Contra y que puso cuatro millones para el segundo envío.
Distintos informes además señalan al rey Fahd de Arabia Saudita —de íntima
vinculación con la familia Bush— como aportante de uno a dos millones mensuales,
entre julio de 1984 y abril de 1985, para financiar a los Contras.
[40] Según la biografía autorizada de Peter Munk, escrita por Donald Rumball, Khashoggi y
Munk se conocieron en Londres, en las oficinas de Peninsular Orient, cuyos directores
se habrían sorprendido al ver a «un árabe y a un judío juntos en su comedor». Ambos
establecieron más de un negocio en común y, en 1985, ante las posibles complicaciones
de la trama Irán-Contras, Khashoggi habría vendido sus acciones en Barrick Gold Corp.,
quedando Munk como cabeza visible del grupo. La minera ha aclarado desde entonces
que no mantiene vínculos con traficantes de armas.
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